El amor y la pasión que pone un ferroviario por su sistema es inigualable e inexplicable, de tal manera que realiza hasta lo imposible para optimizar los casi nulos recursos y recuperar el material.
En el día de ayer junto a nuestro Conductor fuimos testigos presenciales del recorrido por el Taller de locomotoras de Concordia o lo que queda de él, ya que se encuentra en un estado de total abandono producto del salvaje desguace que ha sufrido a lo largo de estos años a causa de la inoperancia y falta de interés de algunos sectores de la empresa que lo creen inoperativo.
Lo paradójico es que de este Taller han salido las únicas 6 locomotoras con la que contamos en el Urquiza en la actualidad, reparadas a nuevas por mano de obra de estos compañeros que no saben de otra cosa que poner el pecho y enfrentar día a día esta situación. Les contamos con orgullo que hemos visto un motor reparado y listo para montar a la loc. 7932, el cual está parado hace dos meses por falta de pintura para esta locomotora, que de terminarse sería la séptima en sumarse y ya se encuentran en el octavo motor (n.r. El costo de estas 8 locomotoras fue menos que un tercio del valor de una de las dos que han sidos enviadas a B.R.T. para su reparación y aún no han regresado.)
Entonces es aquí cuando nos preguntamos: ¿Por qué monosprecian tanto a los trabajadores? ¿Por qué insisten en que el Taller es inoperativo? Cuando de aquí salieron las únicas máquinas que recorren nuestras vías. ¿Por qué la jefatura Intermedia continúa agrandando la grieta? A tal punto que poniendo la excusa de la inundación se ha mudado a un sector alejado y totalmente ajeno al Taller, abandonado a los trabajadores y dejando completamente solo al jefe, en lo que respecta al control administrativo y de gestión inherente al Taller, ¿No será que no se quieren hacer responsables del posible cierre/traslado del Taller inducido por ellos mismos?
Lo real de todo esto es que al día de la fecha, tal como lo viene expresando y manifestando nuestro Sindicato, nosotros los trabajadores queremos participar en una agenda de trabajo para poner de pie a nuestro Ferrocarril. La única garantía que podemos aportar es nuestro trabajo y con hechos concretos, reales y precisos.
Mientras exista una luz de esperanza, no bajaremos los brazos.
Vamos Por Más… Siempre.